Cuidar a un adulto mayor es tan o más complejo que cuidar a un bebé, no en vano hay quienes sostienen que la vejez es volver a la niñez.
Un importante número de familias en el mundo deciden llevar a las personas mayores a un lugar de descanso o casas de cuidado para que reciban la atención adecuada.
También, hay personas que ahorran durante parte de su vida para sustentar la estancia en una de estas residencias durante la vejez.
Seleccionar la mejor casa de cuidado para los adultos mayores no debería ser un problema, ni llegar a convertirse en una odisea. Hay instituciones especializadas que te hacen más fácil esta búsqueda.
Lo importante es encontrar el hogar ideal para ese ser querido, con los aspectos básicos de estructura y personal especializado para su trato.
Pensar en un geriátrico puede llegar a ser aterrador tanto para familiares como para el propio anciano, incluso muchos sostienen que es una crueldad dejar a los abuelitos en estas casas que cuidan a los adultos.
Sin embargo, con el avance de las sociedades estos conceptos van cambiando y se abren espacios dignos para ofrecer un mejor estilo y calidad en los últimos años de vida, convirtiéndose en una novedosa y rentable opción.
Las opciones para este tipo de lugares aumentan cada vez más en proporción a la adecuación de su infraestructura y con servicios que pueden llegar a adaptarse al presupuesto familiar.
Residencias abiertas, iluminadas, de un solo nivel, cercanas a la naturaleza y con un personal cualificado, distan mucho de aquellos sitios oscuros que daban la sensación de viejos hospitales, con los que en años atrás se identificaban a estas residencias.
Para la construcción o adecuación de estas residencias se toma en cuenta la disposición de elementos idóneos como barandas, rampas y pisos antirresbalantes, que ayuden a prevenir lesiones en los pacientes, especialmente en zonas de peligro como el baño.
Las habitaciones deben tener muebles con sistemas de articulación y a niveles adecuados que garanticen la comodidad al sentarse o al acostarse. Hay que tomar en cuenta que muchas de estas personas utilizan sillas de ruedas o muletas.
En estas casas de reposo, por lo general, los baños tienen asientos o deslizadores que dan mayor comodidad a los residentes, en especial a quienes ven mermados sus movimientos.
También es importante la seguridad en las zonas de descanso y ocio, que deben ser sitios abiertos y adecuados para las personas de la tercera edad.
No sólo se requiere unas adecuadas instalaciones para la estancia y cuidado de las personas mayores, lo realmente importante es tener personal cualificado para atenderlos y que ayuden a su aclimatación en su rutina diaria.
Que se sientan resguardados como en su propio hogar, es uno de los principales factores que se debe tomar en cuenta a la hora de elegir la casa ideal para adultos mayores.
También se debe buscar que se atiendan las necesidades de higiene, alimentación y atención médica que se requieren en este periodo de la vida.
Quienes están en estas residencias de reposo buscan pasar los últimos años de su existencia en ambientes confortables, atendidos por un personal que cubra sus requerimientos básicos y junto a contemporáneos con los que puedan compartir ideas e inquietudes.
Bien sea de forma temporal o permanente, la calidad de la infraestructura de la casa en la que estará tu adulto mayor es importante, pero siempre ten en cuenta que la calidez de esos espacios lo determinará el trato que se les ofrece.
Un ambiente confortable deberá ir de la mano de la atención profesional y amable que reciben quienes llegan a la tercera edad.